Elisa Forti comenzó a correr a los 72, y a los 85 años, después de correr diariamente con sol o nublado, y participar en más de 50 carreras y maratones, incluido el cruce de los Andes, también escribió un libro y han hecho una película sobre su vida. Logró el sueño de correr en su ciudad natal, Como, Italia, donde logró sobrevivir a la segunda guerra mundial.
Ana Obarrio con sus ágiles 88 años se destaca en competencias y torneos profesionales de tenis. Hija de padre tenista, en 1948 quiso probar y comenzó su vida en el tenis como federada a los 13 y continuó hasta los 18, cuando se casó. Luego de tener 10 hijos, y siendo viuda, cerca de los 60 años volvió a jugar, y de a poco a competir en torneos internacionales, representando a la Argentina. En 2019 participó del mundial +85 en Croacia, y sigue jugando.
Este corto de Elisa, los acercará a su hermosa historia. Mirá el video
Ana Obarrio se dirige a adultos mayores que le tengan miedo al deporte:
El deporte es una fuente de energía, refuerza la vida, otorga fortaleza, alegría, independencia. Y cuanto más ejercicio hacemos, más podemos hacer.
Fuentes: