Legumbres: grandes aliadas de la buena cocina

 

Nuestras guías alimentarias para la Población Argentina recomiendan el consumo diario de las legumbres.

Entre ellas encontramos los garbanzos, porotos blancos, negros, las habas, las arvejas secas, la soja, lentejas, lentejas turcas, etc. 

Son ricas, nutritivas, están disponibles todo el año, son fáciles de preparar y económicas. Tienen bajo contenido de grasa, no contienen colesterol y son ricas en potasio, hierro y magnesio. Contienen grasas saludables y fibra soluble e insoluble. Son una buena fuente de proteínas y pueden ser un sustituto saludable de la carne.

Además, las legumbres tienen un prolongado tiempo de conservación, con lo cual pueden almacenarse por largos períodos de tiempo sin perder su valor nutricional, siempre, guardándolas en lugares secos y frescos.

¿Cómo usarlas? Las combinaciones de alimentos son infinitas y requieren de creatividad y ganas de experimentar. Solo a modo de ejemplo, se pueden preparar pastas untables de garbanzos (humus), untables de lentejas turcas, así como de arvejas. Las hamburguesas de garbanzos y de porotos blancos, así como de lentejas son buenos sustitutos vegetarianos de la clásica opción de carne. Las preparaciones de cazuelas y guisos pueden llevar con porotos negros, garabanzos (como el puchero) o lentejas (con o sin carne y chorizo). Asimismo, las ensaladas de vegetales crudos pueden completarse con lentejas, o elaborar panes de harina de garbanzos, etc.

Incorporalas a tu cocina diaria y probá nuevas recetas.