Actividad física y Alzheimer

Los investigadores están evaluando el beneficio del ejercicio para retrasar el deterioro cognitivo leve en adultos mayores y mejorar la función cerebral en las personas mayores con riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer. Aquellas personas mayores con deterioro cognitivo leve pueden hacer formas más vigorosas de ejercicio de manera segura, al igual que los adultos mayores sin este deterioro, siempre y cuando no haya otros problemas de salud.

Mantenerse activo y hacer ejercicio puede ayudar a las personas con la enfermedad de Alzheimer u otra demencia a sentirse mejor, a mantener un peso saludable y a tener hábitos regulares para ir al baño y dormir.

Consejos para la actividad física con o sin cuidador

  • Salir a caminar todos los días. ¡El ejercicio también es bueno para los cuidadores!
  • Identificar los mejores ejercicios para los adultos mayores.
  • Bailar al ritmo de la música.
  • Evaluar con prudencia cuánta actividad se puede hacer a la vez. Varios “mini-entrenamientos” cortos pueden ser una buena opción.
  • Asegurarse de que la persona con demencia use ropa y zapatos cómodos, que le queden bien y hayan sido diseñados para hacer ejercicio.
  • Cerciorarse de que la persona beba agua o jugo después de hacer ejercicio.